"Pescadores y pescaderos" by grullo
ayer fui a pescar, bueno, la verdad es que ya de entrada me meto en el papel y me mimetizo con el personaje que da gusto, porque realmente no fue ayer, sino el fin de semana pasado, lo cual me convierte en un pequeño embustero, que posiblemente sea el primer gran paso para convertirse en un gran pescador, pero no mentiras serias que conlleven daño y prejuicios, sino, esas pequeñas mentirijillas, esos pequeños embustes que hacen que alguien sea divertido y esto es lo que va con los pescaderos, uppppps, nono, con los pescadores, que no suelen tener mucho con los pescaderos
hablando de pescaderos, no se a vosotros, pero a mi eso de entrar en una pescadería y encontrar ese olorcito a atún fresco, no confundir con el de sardina podrida que mataría cualquier tipo de acercamiento cariñoso, pero el hecho es que tenéis que imaginaos una pescadería seria, regentada con una chavalita de senos firmes y voluptuosos y con una firme minifalda que deja entrever unas piernas torneadas y sin pelos, claro esta, en las piernas malpensados, en el resto pues bueno, siempre esta bien encontrarse con algún pequeño rastro de mujer, además del olor a pescado, del que hemos comentado que tiene que ser fresco, nada de pescado podrido
bueno, pues el hecho es que me encontré una vez con esa pescadera en un viaje que hice de fin de semana a ponferrada hace un tiempo, encima solo, sin mi mujer que se quedo en casa, por lo que imaginaos mi cara, y lo que no era mi cara, cuando me mandaron a por unos pulpos (realmente fui a comprar maganos, pero como no se como se llaman en cada lugar de españa, no nos complicaremos y diremos simplemente que estaba comprando pulpos, que todos sabéis lo que son) y me tope de frente, bueno, de frente yo, porque ella estaba en ese momento haciendo algo (ni me acuerdo ni creo que me enterara tan siquiera en el momento de que carajo hacia) bueno, el hecho es que yo entre y a la derecha tenían una gran pecera, y dentro de la pecera, pues peces, jajajja, pero lo importante de la historia es que había una chica, asomada a la pecera, lo cual no tenia nada en particular, sino fuera por su pequeña faldita marinera, que al elevarse ella sobre sus pies, la propia falda se levantaba también, dejando aquel mojino presentando una imagen que jamás de los jamases nadie podría olvidar, que cerete amiguitos, es imposible que por aquel sitio alguien pudiera cagar, fijo que no!!! me quede bizco de repente, con la mente en blanco, sin sangre ni oxigeno en el cerebro, incapaz de pronunciar palabra, por lo que me quede ensimismado hasta que yo creo que un tiempo mas tarde, apareció un policía muy majo, pero de no muy buen humor, ya que creo que era familiar o amigo o pareja de la pescadera y me saco de mi ensimismamiento de un soberano guantazo, que me hizo valorar las propinas de las iglesias por su peso, mas que por su importancia
la verdad es que esa historia no da para mucho mas, porque yo rápidamente conseguí reponerme, una vez que el mostachudo agente, me volvió a endiñar otra hostia sin contemplaciones de ningún tipo y darme de frente con los bigotes retorcidos del animal aquel que seguro que se comía las guindillas como las matutano
la chiquilla de la minifalda, ya no estaba en la pecera y aunque trate de buscarla y localizarla, no hubo suerte, de lo cual ahora, me alegro, puesto que en mi mente solo tiene cabida aquel encurtido ojete que me trajo loco durante un mes y por el cual, casi sin quererlo, me lleve dos guantas de tres pares de cojones, desde entonces entro en todas las pescaderías que me cruzo como si fueran iglesias en roma, nunca se sabe donde vas a poder encontrar una obra de arte como aquella
de todos modos, me estoy desviando del tema, porque la verdad es que quería contaros mi experiencia pescanova, pero tendrá que ser la próxima semana, donde os tratare de hacer la crónica desde suiza, donde me envian de ojeador
suerte a los chavales contra los usas!!!
“Pásalo bien. Disfruta de la vida. La vida es demasiado corta para anclarte y desanimarte. Tienes que seguir moviéndote. Tienes que seguir adelante. Poner un pie en frente del otro, sonreír y seguir avanzando” – Kobe Bryant