España - ItaliaEstas historias siempre suelen empezar con el típico “erase una vez” y como no, ésta historia no iba a ser menos:Érase una vez, un joven chaval que desde pequeño le gustaba el juego este de la pelota. Con 5 años iba a todos lados con esa pelota que le regalaron por reyes. Nada más verla ya supo que su viaje sería largo, muy largo.
Con los años, yendo al colegio y disfrutando cada vez más del baloncesto se daba cuenta de que había chavales con mucha más técnica que él, más potencial y sobretodo más altura.
Esto le llevaba por la calle de la amargura, mientras que sus amigos ya le sacaban una cabeza él no lograba ese ansiado estirón que a los demás si les había dado. Pero no bajaba la cabeza, seguía y seguía entrenando, que como él decía: “
No tendré la mejor técnica, ni seré el más alto, pero sé que soy bueno.”
A los 15 años entró en el equipo de su pueblo, jugaba entre suplente y titular algunos partidos, y siempre daba todo lo que tenía dentro por el deporte al que ama. Se graduó en el instituto y se matriculó en una universidad mediana. Consiguió entrar en el equipo de la universidad y en su primer año algo cambió.
Pegó ese pequeño estirón que deseaba, llegó hasta el 1`88, suficiente para un base, decía él. Y su confianza se vio aumentada al máximo. En su primer año de universidad y con 20 años hizo muy buenos números y esto llegó a oídos de un scout de la selección sub21.
El scout se pasaba por los partidos de nuestro protagonista de vez en cuando para seguir su trayectoria. Cuando cumplió 21 años, éste mismo scout se presentó un día en un entrenamiento del equipo de la universidad y le dijo que contaban con él para formar una nueva selección. El chaval no pudo contener las lágrimas.
Ese chaval es ahora
David Garrote (24937309) y aunque ahora esté lesionado él sabe que volverá a jugar y a aportar a su equipo, porque al fin y al cabo, esa es su pasión.
Ahora viene Tatamka con lo importante xP