Cuéntame un cuento y verás qué contento me voy a la cama y tengo lindos sueños. Cuéntame un cuento y verás qué contento me voy a la cama y tengo lindos sueños. Pues resulta que era un rey que tenía tres hijas, las metió en tres botijas y las tapó con pez, y las pobres princesitas lloraban desconsoladas, y su padre les gritaba que por favor entrenaran. Las princesas se escaparon por un chino que invertía, que las llevó por la vía del entreno y la elasticidad, y en Italia se perdieron y llegaron a Jamaica, se pusieron hasta el culo de entrenar defensa en la playa. Jugando en la playa estaban cuando apareció su padre, con la vara de avellano en la mano amenazando, pujó por ellas como pudo y tropezó con la puja, que tenía chino dentro, que tenía chino fuera. Les concedió tres deseos y ahora felices estamos, y colorín, colorado este cuento se ha acabado, y resulta que este rey que tenía tres hijas, las metió en tres botijas y las tapó con pez. Cuéntame un cuento, el (Xavier) Anguela junta puntos, el que vuela por los aires, el que nos seduce a todos. Cuéntame un cuento, el del Nicolàs Bañales, que te deja cinco duros cuando se te cae un diente. Cuéntame un cuento, que ya creo que vamos ganando, cuéntame un cuento, con música voy viajando. Cuéntame un cuento, que todavía no es tarde, cuéntame un cuento, que el mundial está que arde.
Sobre lo de seguir a la ñ21, esta temporada lo llevo fatal...snif. Apenas he seguido algún partido, del mismo modo que la absoluta. Ando muy escasete de tiempo estos días y la cosa está apuradilla...esta semana sin ir más lejos se me ha jodido la quiniela del surienco de los huevos...digo Gerard, y ya me he olvidado de tener alguna posibilidad de pegar la machada por ahí.