Buenas a todos,
Llego muy tarde y pido disculpas por ello. Supongo que voy tan tarde que muy poca gente lo va a leer, pero si alguien me ha votado, al menos le debo una explicación de por qué me estoy presentando.
Este juego ha sido mi favorito durante muchos años, recuerdo la primera vez que me metí, viniendo de hattrick. Un fondo rojo, quizás un poco extraño, unas habilidades con nombres indescifrables, pero sobre todo... ¡Un simulador de baloncesto! ¡Y vaya simulador! ¿Quién quiere hattrick? Mi segundo día de Buzzer fue mi último de HT. Para un niño que se deslizaba a escondidas de madrugada para ver al Jordan del 96 destrozar a los Jazz este juego era demasiado bonito para ser verdad. Pero la sorpresa aún fue mayor cuando empecé a entender un poco cómo funcionaba, y cuanto más horas metía, más me atrapaba. Vinieron unos años mágicos, unos años de estudiante en los que lo más importante de todo eran las chicas y River Legends, ¿A quién le importa el dinero o el futuro cuando puedes ganar una ACBB y luego comerte la noche?
Pero todo pasa. Me desmotivé. La vida dio muchas vueltas y lo de fuera empezó a importar más. El juego desapareció de mi vida. No obstante, todos los días 28 de cada mes me conectaba para no dejar a River Legends morir. ¿Por qué lo hice? Quizás fue sentir que mataba muchas horas de mi vida pasaba si lo hacía, como si perdiendo el equipo asumiera que todo había sido una pérdida de tiempo, o quizás era puro romanticismo, o quizás había un cachito de mi juventud al que no quería dejar marchar, o quizás fuera un simple diógenes digital. O quizás un poco de todo.
La cuestión es que nunca lo terminé de dejar ir, y mucho tiempo después, un día volví. Sin explicación alguna, de un día para otro me presenté a unas elecciones
(274415.4) y eso desencadenó un regreso lleno de emociones, volví a esas 180 pulsaciones mientras veía lives, volví a poner a este juego en la carpeta de los idilios de mi vida. No duró lo que duró en el pasado, sólo fueron unas pocas temporadas. Pero suficientes para que mereciera la pena.
Cuando todo terminó, hace ya bastante tiempo, la desidia me abrumó, una vez más dejé el equipo en stand by, pero con un proyecto muy fuerte latente, que si se hubiera llegado a desarrollar, hubiera sido divertido de llevar. Desgraciadamente en las temporadas clave, o más bien en las pretemporadas clave, no he tenido el suficiente tiempo para conseguir en el mercado aquello que quiero. Tengo unos horarios tan raros que lo mismo tengo 3 horas seguidas como ahora que no tengo acceso al juego de manera consistente en 4 días. Se me hace imposible fichar los jugadores que quiero, eso hace que me acabe desmotivando y hasta se me pasan las alineaciones (o más bien no llego a tiempo), como esta primera jornada de ACBB.
Por eso, aunque parezca incomprensible y contradictorio, he querido tirar por aquí. Un poco sin pensar, un poco de un día para otro. En una selección no juegas cada 2-3 días, juegas cada 7. Tampoco tienes que fichar. Quizás por eso siempre me gustaron las selecciones. Le he dado unas vueltas estos días a si retirar la candidatura, pero siempre he sido de extremos, del estímulo total o la desidia.
Del todo o nada.
Antes prometía mundiales en mis discursos, ahora no puedo prometer nada.
Si hay algún momento en el que menos presto atención al juego, es ahora.
Si hay alguna vez que menos he analizado el juego y sus cambios, es ahora.
Si hay alguna vez que tengo siento que es un suicidio coger este equipo, es ahora.
Si hay alguna vez que el fracaso es lo más probable, es ahora.
Y sin embargo, siento que el juego me debe algo.
Siento que aún puede haber algo del viejo Leyen en mí.
Siento que quiero encontrarlo.
Last edited by LeYeNdiNhA at 11/7/2022 4:27:59 PM