Bueno, ya que tenemos un hilo abierto acerca del movimiento ofensivo os comento mi experiencia.
Allá en mis inicios en V división me fiché un pivot con pases 9. Tampoco era gran cosa en lo demás, pero como confiaba en entrenar unos buenos exteriores, pensé que lo importante es que le llegasen pases a los de fuera que acabarían siendo mejores que este pivot. El caso es que como mis entrenables tampoco es que fuesen la hostia, iban algo flojos de pases y mi pivot se infló de hacer triples dobles y promediaba un montón de pases por partido. Yo estaba emocionadísimo y defendía a muerte al pivot pasador. Tras coger un rebote, siempre será estupendo poder dar un buen pase si tu capacidad anotadora no es la hostia. Estaba convencido de que funcionaba.
Lo comenté por el foro de ayuda, que lo del pivot pasador era la hostia. Alguien con bastantes luces me dijo... eso es que tienes una mierda de movimiento ofensivo. Fijo que tus exteriores van flojos en pases. Pensé que me había jaqueado la cuenta y había mirado a mis entrenables xD. Iban flojos de pases, si. Les acabé subiendo esta habilidad y como por arte de magia mi pivot dejó de dar asistencias como lo hacía.
El caso es que cuando mi pivot asistía mi equipo no jugaba tan bien como después. Se tiraba un montón de tiros en el último segundo incluso con tácticas rápidas. Al mejorar esta faceta, el equipo jugó mejor, los pases se repartieron, y mi pivot dejó de asistir.
No aprendo de mis errores y me encuentro en una situación similar. Me he quedado con 6 jugadores exteriores entrenables y jóvenes y andan con carencias. Otra vez tiro en los últimos segundos y otra vez se nota que mis interiores (pases respetables los dos) asisten un montón. Me lo he tomado como una señal y he parado los planes para entrenar pases un par de niveles y ver si arreglo el tema.
Conclusión: Si tus interirores dan muchas asistencias, no des palmas. Es que algo falla en tu movimiento ofensivo. Mejora los pases de los de fuera y verás que todo marcha mejor.
Espero tener razón y poder enderezar esta catastrófica temporada.