Post-Partido
Ya estamos aquí de vuelta. Y esta vez toca comentar una derrota. Una derrota que era posible vista la entidad del rival, pero igualmente dolorosa. En la previa nuestras mayores dudas estaban centradas en el puesto de alero, donde el regular de forma una de nuestras estrellas, Mikel Zuya, condicionaba mucho el planteamiento tanto ofensivo como defensivo. Por otro lado, las formas de los polacos en su juego interior eran espectaculares, por lo que temíamos un poco su juego interior, aunque también eramos conscientes de que suelen comenzar los campeonatos con mover el balón. Por todo lo dicho decidimos salir con lo mejor que teníamos en este momento, ataque exterior y defensa individual.
Por otro lado había dos situaciones que condicionaban mucho el partido. Por un lado el hecho de que los polacos son los anfitriones y por tanto cuentan con el factor cancha. Por otro, a la espera de que el míster no me rectifique, los equipos que vienen de la repesca parten con la ventaja de poder traer mas espíritu acumulado (creo que el reseteo de forma no afecta a estas selecciones pero espero aclaraciones al respecto). En cualquier caso solo el hecho de jugar como local les daba un plus de favoritismo que desgraciadamente se ha confirmado.
El partido comenzó muy igualado, pero enseguida en el segundo cuarto se abrió una diferencia de 7-8 puntos que a la postre fue definitiva. A pesar de ello hubo momentos en el 3º cuarto, especialmente cuando entraban los interiores suplentes polacos, en los que España se puso por delante, pero nunca con rentas mayores de 3 puntos.
En el aspecto individual destacar la labor de Miguel Campaspero con 27 puntos y un mas que notable 4-9 de 3 puntos. También reseñables los 33 puntos de Luciano Courel que sin embargo solo pudo anotar 2 de 11 desde mas allá del 6.75. También muy valiosa la labor en el rebote de nuestros pivots titulares. En el apartado negativo destacar el pobre porcentaje de 3 puntos, 7 de 26, y las 27 faltas recibidas por frente a las 12 a favor (producto de los 2 hechos comentados anteriormente, el mayor espíritu y el hecho de actuar como local).