Básicamente la razón es la que te han dicho.
Jugando relajado, acumulas entusiasmo, que puedes aprovechar luego jugando normal en partidos importantes (rival, TV, o claves para clasificación), pero también es cierto que al final lo importantes es conseguir el objetivo.
Si tu objetivo es la permanencia y consigues clasificarte para play off, aunque hayas usado el entusiasmo para conseguir esas últimas victorias, ya no lo necesitas.
Si tu objetivo es el ascenso, el equilibrio entre no perder partidos que te quiten el factor cancha en play off y mantener alto el entusiasmo es más difícil.
En fin, es una cosa más a intentar manejar en el juego, junto con los entrenos y la forma. Entre el entusiasmo, la forma y las tacticas/predicciones se puede conseguir unas cuantas victorias extra que marquen la diferencia.