Cristao, a mí no me gustan las guerras, no me gustan ni las armas blancas ni las armas de fuego, pero me gustaría quedar contigo algún día, estoy mucho más cerca de lo que crees, así que si te apetece quedar un día a desayunar yo puedo darte un buen bocadillo de puñetazos en el estómago.
Ahora en serio, como buen mexicano que soy, te pido perdón si te molestó algo de lo que te dije anteriormente, pero tengo la conciencia tranquila porque todo lo que te dije fue verdad, si algo te molestó es porque las verdades duelen. Te pido perdón si te molestó algo de lo que te dije.
Cristao, los que te conocemos desde hace muchos años sabemos que fuiste un gran mánager, hiciste hazañas increibles cuando absolutamente nadie confiaba en ti, entrenaste grandes jugadores tanto para la U21 como para la absoluta, estuviste a punto de llevar un jugador a la todopoderosa selección Española, le diste repasos tácticos a Kulca y a Roy en muchos partidos cuando nadie confiaba en ti, estuviste a punto de ganar la Copa... estabas en el Olimpo de los Dioses, lo tenías todo para ser el mejor mánager mexicano de la historia de Buzzerbeater, pero te viniste abajo y estas últimas dos temporadas bajaste el nivel.
El juego evoluciona, y no te has sabido adaptar, pero vovlerás a ser el que fuiste, resurgirás como el AVE FENIX. El espiíritu de KIKIN siempre estará presente en la Comunidad mexicana.
Un abrazo Cristao.