La temporada que termina ha sido la más grande de la historia del club. Nunca habíamos ganado antes la copa y haberlo logrado ha restañado viejas heridas de hace mucho tiempo en esta competición.
Por otra parte, el doblete, jamás logrado antes en BB España, es un hito que creo que será dificilísimo volver a repetir, quizás en un futuro, con un cancha de ACBB dilucidado en 15-16 victorias en vez de 19 sea posible, pero tal y como están las cosas, en un país de casi 6000 usuarios, lo veo como mínimo muy jodido.
Más que una rueda de prensa al uso, será una explicación de como viví los acontecimientos de esta T13, la temporada de la calculadora.
Los éxitos de este año no fueron ni mucho menos fáciles, como ya he comentado ha sido una temporada de hacer números, midiendo con frialdad las posibilidades del equipo y actuando en consecuencia. En un principio parecía que iban a ser necesarias 20-21 victorias para lograr el cancha, ya que CDC, principal rival de este año, empezó fortísimo, pero por suerte para River los pinchazos que fue teniendo - no demasiados, todo hay que decirlo - fueron pequeños balones de oxígeno, al final determinantes porque permitieron arriesgar algunas jornadas en liga en pos de luchar la copa.
Lo más difícil de lidiar fue sin duda el tema formas y la gestión de las semanas finales, donde ya sin margen de error, había 3 partidos a muerte y la obligación de ganarlos todos para seguir soñando. Renunciamos al fichaje que llevábamos tiempo planeando y en vez de hacernos más fuertes a un partido decidimos agrandar la plantilla con 2 o 3 refuerzos. Asegurar la liga suele ser lo más importante pero cuando la has ganado ya 4 veces intentas cosas diferentes, si esto hubiera ocurrido en mis primeros años en ACBB reconozco que nunca hubiera actuado así.
Al final el objetivo fue el siguiente: Tratar de ganar por la mínima los partidos claves arriesgando en principio victorias que podían ser bastante claras. Y eso hice, confiar en plantear las cosas para que se decantaran a mi favor, pero siempre con ese regusto que deja lo incierto.
Le eché un par de pelotas y salí PON en toda una final de copa contra el gran Rabadense (3 finales consecutivas en 2 años) y a punto estuvo de costarme caro, ese 83-87 y posesión me los puso de corbata en los minutos finales. Por suerte gané y aunque la decisión tuvo un punto de locura desde fuera ese PON fue a la postre fundamental para la consecución del título de la ACBB, ya que las formas que iba a traer a las finales eran desastrosas en comparación a las que traería mi rival e iba a estar obligado a jugar decisivos los 2 de casa.
Una vez en las finales, y tras jugar contra una pieza de caza mayor como Onuba Ravens, con River de nuevo con los huevos de corbata afrontamos el partido más vulnerable de toda nuestra historia, con Muguerza en forma regular y Juán Álvarez en fuerte bajo de alero titular. El equipo salvo Liza y algún interior muy tocado. Por suerte Ciudad de Córdoba no lo vio así y guardó la artillería regalando el partido, no es como lo hubiera jugado yo pero tampoco se puede decir que fuera un mal movimiento, ya que no quedaba todo decidido - ni mucho menos - porque se aseguraba llegar al 3º de la final con mejor entusiasmo y posiblemente presumía que sus formas iban a mejorar más que las mías, como así fue. Desde un punto de vista del espectador iba a ser mucho más emocionante.
Editado por GM-LeYeNdiNhA el 09/10/2010 15:27:33